Jesucristo es nuestro Señor y Salvador. Qué bueno es cuando las personas buscan a Jesús para satisfacer una necesidad espiritual tan importante como es la salvación de su alma, la cual solo se obtiene a través de él. Jesús dijo: “yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi”, (Juan 14:6). Pero hay otros que buscan a Jesús no para su salvación, sino para obtener cosas materiales para satisfacer sus deseos carnales, simple y llanamente. Esa es la estrategia de muchos religiosos y falsos profetas en estos tiempos. Al respecto, tenemos un ejemplo contundente en el Evangelio de Juan, capitulo 6, que luego de la multiplicación de los panes y los peces, en los que fueron alimentados más de cinco mil personas, sin contar a las mujeres y niños, muchos comenzaron a buscar a Jesús, “Y hallándole al otro lado del mar le dijeron: Rabí, ¿Cuándo llegaste acá? “Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque h