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Confianza al Orar

MATEO 7.7-11 A veces, nos volvemos impacientes en nuestra vida de oración. Podemos enojarnos, o simplemente darnos por vencidos y llegar a la conclusión de que Dios no nos escucha cuando no responde nuestras oraciones de inmediato o de la forma exacta que esperábamos. La verdad es que Dios se deleita en responder nuestras oraciones, y ha dado abundantes promesas que deben motivarnos a hablar con Él. Si entendemos lo que Jesús estaba diciendo en Mateo 7, podremos orar con mayor confianza. Pedir es la parte fácil. Pedimos ayuda para hacer nuestro trabajo o protección para nuestros hijos. E incluso, pedimos estar más cerca de Dios. Sin embargo, algunas veces necesitamos hacer algo antes de que Dios dé una respuesta a nuestras oraciones. Por ejemplo, si le decimos a Dios: “Señor, ayúdame a entender la Biblia”, debemos proceder a abrir la Biblia y comenzar a leerla. Por último, llamar demuestra que estamos viniendo al Señor con un sentido de dependencia de Él. Reconocem

Caballito de palo

  Un padre llevó a su hijito a un largo paseo por el bosque. Como era pequeño, le llevó sobre sus hombros por mucho rato. Luego le puso de pie y le dijo que tendría que caminar hasta la casa. Al rato el pequeño lloraba porque estaba muy cansado, demasiado cansado para dar un paso más. El padre cortó un palito y lo limpió muy bien de toda astilla mientras el niño observaba. Al terminar, dijo: «Mira, hijo, aquí tienes tu propio caballito para que te lleve a casa». Encantado, el niño se montó sobre su caballito y felizmente llegó a casa. Y en casa dio vueltas por todo el jardín hasta que tuvo que ir a bañarse y acostarse, ya rendido. A veces nuestro Padre nos lleva y a veces nos deja caminar, y muchas veces creemos que ya no podemos más cuando alguien, movido por él, nos ofrece un caballito – una idea, una promesa, una canción nueva, un cariño, una oración intercesora, lo que sea, y sobre ese corcel llegamos a la meta. ¿Necesitan un caballito? ¿Otro hermano está necesitando

Círculo del odio

   Un importante señor gritó al director de su empresa, porque estaba enojado en ese momento. El director llegó a su casa y gritó a su esposa, acusándola de que estaba gastando demasiado, porque había un abundante almuerzo en la mesa. Su esposa gritó a la empleada porque rompió un plato. La empleada dio un puntapié al perro porque la hizo tropezar. El perro salió corriendo y mordió a una señora que pasaba por la vereda, porque estaba obstaculizando su salida por la puerta. Esa señora fue al hospital para ponerse la vacuna y que le curaran la herida, y gritó al joven médico, porque le dolió la vacuna al ser aplicada. El joven médico llegó a su casa y gritó a su madre, porque la comida no era de su agrado. Su madre, tolerante y con un manantial de amor y perdón, acarició sus cabellos diciéndole: "Hijo querido, prometo que mañana haré tu comida favorita. Tú trabajas mucho, estás cansado y precisa una buena noche de sueño. Voy a cambiar las sábanas de tu

Ángeles en el callejón

Diana, una joven estudiante cristiana de la universidad, estaba en casa en el verano. Fue a visitar algunos amigos y por quedarse charlando, se le hizo muy tarde, más de lo que había planeado y tuvo que caminar sola a su casa siendo ya de noche. No tenía miedo porque vivía en una ciudad pequeña y a solo unas cuantas manzanas del lugar. Mientras caminaba a su casa, oró a Dios para que la mantuviera sana y salva de cualquier peligro. Cuando llegó al callejón que le servía como atajo para llegar más pronto a su casa, decidió tomarlo; sin embargo, cuando iba por la mitad, vio a un hombre parado al final del callejón y parecía estar esperando por ella. Diana se puso nerviosa y empezó a orar a Dios por protección. Al instante un sentimiento de tranquilidad y seguridad la envolvió; sintió como si alguien estuviera caminando con ella; llegó al final del callejón y pasó por delante del hombre pero no pasó nada, y llegó bien a su casa. Al día siguiente, leyó en el periódico qu

¡Calma!

Después del 11 de septiembre, una compañía invitó a los miembros que quedaban de otras compañías que habían sido afectadas por el ataque de las Torres Gemelas, para compartir su espacio disponible de oficina. En una reunión de la mañana, el jefe de seguridad contó historias de por qué esta gente estaba viva … y todas tenían que ver con pequeños detalles, como habrán oído: Al director de la compañía se le hizo tarde porque era el primer día del kínder de su hijo. Otro compañero estaba vivo porque le tocaba llevar los donuts. Una mujer se retrasó porque su despertador no sonó a tiempo. A uno se le hizo tarde porque se quedó atorado en la carretera en la que había un accidente. A otro se le fue el autobús. Alguien le tiró comida encima y tuvo que tomarse el tiempo para cambiarse. Uno tuvo un carro que no arrancó. Una se regresó a contestar el teléfono. ¡Otra tuvo un bebé! Otro no consiguió un taxi. El que más me impresionó fue un señor que se puso un par de zapatos nuevos

Aviva la llama

Cuentan que un rey muy rico de la India, tenía fama de ser indiferente a las riquezas materiales y hombre de profunda religiosidad, cosa un tanto inusual para un personaje de su categoría. Ante esta situación y movido por la curiosidad, un súbdito quiso averiguar el secreto del soberano para no dejarse deslumbrar por el oro, las joyas y los lujos excesivos que caracterizaban a la nobleza de su tiempo. Inmediatamente después de los saludos que la etiqueta y cortesía exigen, el hombre preguntó: "Majestad, ¿cuál es su secreto para cultivar la vida espiritual en medio de tanta riqueza? El rey le dijo: "Te lo revelaré, si recorres mi palacio para comprender la magnitud de mi riqueza. Pero lleva una vela encendida. Si se apaga, te decapitaré". Al término del paseo, el rey le preguntó: "¿Qué piensas de mis riquezas?" La persona respondió: "No vi nada. Sólo me preocupé de que la llama no se apagara". El rey le dijo: "Ese es mi secreto.

A ella le debo

Cuando la conocí tenía 16 años, fuimos presentados en una fiesta, por un tío que decía ser mi amigo. Fue amor a primera vista, Ella me enloquecía. Nuestro amor llegó a un punto, que ya no conseguía vivir sin ella. Pero era un amor prohibido. Mis padres no la aceptaron. Fui expulsado del colegio y empezamos a encontrarnos a escondidas. Pero ahí no aguanté más, me volví loco, yo la quería, pero no la tenía. Yo no podía permitir que me apartaran de ella. Yo la amaba: destrocé el coche, rompí todo dentro de casa y casi maté a mi hermana. Estaba loco, la necesitaba. Hoy tengo 39 años; estoy internado en un hospital, soy inútil y voy a morir abandonado por mis padres, amigos y por ella. ¿Su nombre? Cocaína. A ella le debo mi amor, mi vida, mi destrucción y mi muerte. Freddie Mercury (1946-1991). Lo escribió antes de morir de SIDA. En gran cantidad de ocasiones los seres humanos tendemos a volver nuestra mirada a Dios y reconocer nuestros errores ya cuando es demasiado tarde. Apro

Aprendiendo a comprender a los demás

La enfermera acompañó a un joven cansado y ansioso hasta la cama de un hombre mayor. Su hijo está aquí, le susurró al paciente. Tuvo que repetir esas palabras varias veces antes que los ojos del paciente se abrieran. Estaba bajo los efectos de un fuerte sedante debido al dolor por su ataque al corazón, y veía confusamente al joven parado en el exterior de su carpa de oxígeno. Extendió su mano y el joven la tomó firmemente con las suyas, transmitiéndole un mensaje de aliento. La enfermera trajo una silla al lado de la cama. Toda la noche el joven estuvo sentado sosteniendo la mano del anciano y dándole suaves palabras de esperanza. El moribundo no decía nada mientras se sostenía firmemente de su hijo. Al acercarse la madrugada, el paciente murió. El joven puso sobre la cama la mano sin vida que había estado sosteniendo y fue a notificar a la enfermera. El joven esperó, mientras la enfermera hacía lo necesario. Cuando concluyó su tarea, la enfermera comenzó a prodigar palabras

EN IDAHO: MINISTROS PAGARÁN UN PRECIO POR NEGARSE A CELEBRAR BODAS GAY

“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos.” 2 Timoteo 3: 1. Desde que Obama fue elegido en 2009, docenas de leyes y órdenes ejecutivas han sido puestas en silencio, creando un ambiente que es en gran medida a favor de las políticas y la práctica LGBT. Su plan a sido más bien tratar de silenciar e infundir miedo a cualquiera que se oponga a su agenda radical. El cristianismo y la Biblia están bajo ataque directo en los Estados Unidos, estamos a punto de vivir el tiempo en el que los predicadores de la antigua Evangelio sean sacados de sus iglesias y colocados en la cárcel. La Mafia LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales), cuenta con el pleno respaldo del gobierno de Obama, y no se detendrá ante nada para lograr su objetivo declarado de la dominación. La ciudad de Coeur d’Alene, Idaho, está tomando una medida a favor del matrimonio del mismo sexo, obligando que los que tienen objeciones religiosas celebren matrimonios entre per

Como un pedazo de pastel

A veces nos preguntamos: ¿Que hice para merecer esto? ¿Porque Dios tiene que ser tan injusto conmigo? Aquí va una bellísima explicación. Una joven le dice a su madre como todo le ha salido mal: no salió bien en el examen de Matemáticas, su enamorado resolvió terminar con ella y su mejor amiga está de paseo en otra ciudad. En horas de amargura, una madre sabe qué puede agradar a su hija… Le preparará un sabroso pastel. En aquel momento tan difícil, abrazó a su hija y la llevó a la cocina, consiguiendo arrancar de su rostro una sonrisa. Luego que la madre separó los utensilios e ingredientes que usaría, los colocó en la mesa y preguntó a su hija: -Querida, ¿quieres un pedazo de pastel? - Claro madre, Sabes que me encanta el pastel… -Está bien, respondió la madre. Bebe un poco de ese aceite que está en la cocina! Asustada, la hija respondió: - ¿Cómo dices? Jamás!!! - ¿Qué tal si te comes un huevo crudo? - Nunca, Madre! - Quieres comer un poco d